Navidad fuera de casa


(Entre frazadas y chocolate caliente)

La primera vez que pasé las fiestas en Italia, pensé que me iba a morir de melancolía. Todo me parecía extraño y en efecto lo era...Tengo una foto armando un arbolito, que para agregar a lo raro era "natural" tenía un "pulóver" de lana marrón, estoy arrodillada y el flash de la cámara que no ayudó...tengo una cara pálida y un gesto como diciendo...quien me mandó?

Esa foto la ubiqué lo mismo en uno de mis álbumes, y cada vez que la miro me acuerdo de la nostalgia...

La única cosa que me había gustado aquella vez, era la cantidad de adornos que podían verse en supermercados y negocios, para comprar o solo para mirar. 

No podía encontrarle a ese momento del año un sentido, sin el calor agobiante rosarino, sin las bebidas heladas, la familia reunida, salir y volver al amanecer, (con el sol que quemaba las pestañas), la chopera en la casa de las tías, las grandes siestas del 25, todos tirados en el piso con los ventiladores que no paraban de girar, las "soleritas", las bombachas rosas, las sandalias, los cuerpos bronceados, las copas rotas (porque daban suerte) los sándwiches de miga, bailar en la calle hasta desmayar y el verano que recién empezaba...

Cuando estaba en la secundaria, un día llegó una reemplazante, que dijo, hacía muy poquito había vuelto de vivir diez años (oh casualidad!) en Italia...Ella que no tenía muchas ganas de trabajar y nosotras, adolescentes perezosas, le sacábamos charla para "pasar la hora", nos enteramos con mucho asombro  que los italianos en Navidad, se divertían jugando a la tómbola! Ella lo contaba como la cosa más aburrida que le había pasado en esos diez años, y lo daba como uno de los motivos, por los que había decidido volverse....nosotras que empezábamos a vivir, pensábamos "que suerte que tenemos de vivir de este lado del mundo "

Pasaron una, dos, más, muchas más Navidades y al fin me acostumbré...a comer frutos secos sin que caigan como un ladrillo al estómago, a dejar las bebidas en el balcón, que total con las bajas temperaturas se enfrían más que en la heladera, a ver  esas películas de atmósfera natalicia y que no me parezcan de ciencia ficción, a que la bombacha para fin de año es roja, a la quietud del condominio el 24 a la noche, a que el 25 a las 7am me empiece a sonar el teléfono porque todos me mandan "Gli auguri!" a vestirme de Papá Noel y que no me salga urticaria, a regalar bufandas o medias con dibujos de renos o duendes, a pasar el Año Nuevo con amigos, y a comer guiso de lentejas con "cotechino", a admirar las luces del centro, de cualquier ciudad por más pequeña que sea...y obviamente, a jugar a la tómbola! 

Será por mis hijos que nacieron acá, será porque la adaptación es parte del ser humano, será porque aprendí a encontrar el lado bueno de las cosas, será por la cantidad de exquisiteces que he descubierto, será por lo que será, pero ahora, para mí, la verdadera Navidad es bajo cero! y así la espero...

 Y ni les digo si llega a nevar! 💜



Lainate (2020)



Milano (2017)



Lainate (2011)



Pero (2003)




"E un giorno di dicembre arriverà l'estate
Perché le cose fanno quello che gli pareSeguendo i punti esatti delle coordinateSicuro ti ritrovi perso in mezzo al mare

Ma se lo senti lo saiSe lo senti lo saiSe lo senti lo saiSe lo senti lo sai"

(Jovanotti)




Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares